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Las zonas de reproducción de aves protegidas y el cordón dunar del Parque Naturalde l’Albufera cuentan desde hace unos días con nuevas medidas de protección de la fauna y flora, con nuevas vallas de separación y un aumento de la superficie protegida. «Un paso muy importante para la protección de especies protegidas como el chorlitejo patinegro y también del cordón dunar de las playas», ha señalado el vicealcalde y concejal del área, Sergi Campillo.

El Servicio de Devesa-Albufera del Ayuntamiento de València consideró necesario proteger la zona embrionaria y el primer frente dunar en dos nuevos tramos de las playas de la Devesa Norte, mediante estacas, cuerdas y carteles informativos. «Tal como nos comprometimos con el voluntariado de elParque Naturalde l’Albufera, hemos modificado el cierre de separación de las zonas de cría del chorlitejo patinegro en las playas y también del lago de Pujol. Hemos aumentado la zona de separación, también en el cordón dunar protegido con estacas y cuerdas», ha explicado el vicealcalde y concejal de Ecología Urbana, Sergi Campillo.

El objetivo de esta medida es fomentar la conservación de los tramos de playa que mantienen zonas de embriones dunars y en los cuales en los últimos años se ha detectado presencia del chorlitejo patinegro, pájaro catalogado como vulnerable en el «Catálogo Valenciano de Fauna Amenazada».Estaszonas embrionarias aparecen protegidas en la directiva europea como «Vegetación anual sobre desechos marinos acumulados» y «Dunas móviles embrionarias». El papel de estosespaciosnaturales es fundamental en la formación de dunas y en la estabilidad de las playas.

Campillo ha avanzado también que en pocas semanas «instalaremos nueva cartelería para informar los visitantes de estosespacios tan sensibles de la prohibición de traspasar las zonas acotadas y de llevar siempre los perros atados por no molestar a las especies que se está reproduciendo».

En este sentido, en el lago de Pujol se ha cambiado la valla de protección anterior formada por estacas y cuerdas por una valla más infranqueable, con el objetivo primordial de que los perros sueltos no puedan acceder en la zona acotada y aumentar, portanto, las posibilidades de éxito reproductivo de especies como elchorlitejo. «El lago se ha convertido en una zona de reserva y hay que protegerlo tanto de perros sueltos como de personas que antes saltaban por encima de las cuerdas. Ahora con esta nueva valla se hace mucho más difícil.Estanueva valla además permite la movilidad de las especies animales salvajes, como por ejemplo las tortugas terrestres», ha añadido Campillo.

Otros tramos de actuación

Los trabajos también se han realizado en otros dos tramos concretos delParque Natural. El primero es el de la playa del Arbre del Gos, a la altura del mirador situado en el extremo sur de esta playa. Estecierre tiene unos 250 metros de perímetro, dejando un paso peatonal en el norte y sur de este, así como suficiente espacio entre el cierre y la línea de playa para el paso de vehículos de vigilancia y mantenimiento. En 2020 ya se observaron en esta zona 3 parejas dechorlitejoque se reprodujeron con éxito.

El otro tramo es el de la playa de la Garrofera, frente al edificio del antiguo hotelSidi-Saler. El cierre tiene aproximadamente 300 metros lineales de perímetro. La totalidad de la superficie que se ha protegido está formada por dunas bajas y embrionarias. Durante las observaciones realizadas durante los años 2020 y 2021 se detectó presencia de chorlitejo que ha utilizado este espacio como lugar de alimentación, con un alto potencial para el establecimiento de nuevas parejas dechorlitejo patinegro, en la medida que consiga evitarse el tránsito de personas y se aumente la tranquilidad de este espacio.